Se sumergió de nuevo, en esas profundidas que tan bien conocía, creyendo que, esta vez, podría ser inmune al frío del agua; creyendo que podría soportar los latigazos furiosos de la corriente. Siempre la caracterizó esa inocencia casi suicida, pero ella no lo sabía; no en ese momento...
Y sin más, corrió a través de sus sueños, de sus pesares, del dolor y la frustración; a través de esos brazos que quisieron sujetarla, de esas palabras que quisieron confundirla y de las miradas que intentaron amordazarla. Corrió velozmente, dejando ese mundo, y sin mirar siquiera una vez atrás, se lanzó con todo el peso de su abarratoda alma hacia aquel oscuro horizonte. Se lanzó de lleno, para dejar de dividirse en dos, para evitar reflejarse y no reconocerse.
Se lanzó para no tener que ver nada, nunca más.
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algo que escribí en mi flog hace unos días.
suena: To my Y - Yiruma
martes, 1 de diciembre de 2009
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