martes, 9 de agosto de 2011

No importás. No servís. No encajás.
Nadie puede succionar nada de vos.
Sos inútil. Despreciable. Prescindible.

Debería sentirme mal?
Lo veo en sus ojos, en su indiferencia.

Está bien.

Por qué habría de sentirme especial?
Soy un molde;
una máquina rota.
Una muñeca imperfecta.
Un saco de mierda.

Está bien.




Por qué habría de ser de otra forma?

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