Deep down

La vida es una sucesión de errores, golpes y luego, momentos de claridad... Gracias a Dios, siempre llega ese momento en el que nuestras horas se iluminan mediante la aparición de algo positivo, que transforma (aunque sea un poco) la realidad en la que vivimos. La cuestión es qué hacer cuando la decisión parece tan clara, pero a la vez tan difícil. Mi mente me dice que eso no importa, que debo hacerlo si lo creo correcto; pero por otro lado, lo que siento me guía por otro camino, lleno de aquellas cosas que vivo cuando sueño despierta, donde la realidad es más sencilla y por qué no, más feliz...
Pero no, nada es así. Nada es lo que parece. Siempre hay más motivos y cuestiones ocultas detrás de lo que vemos. Supongo que busco incansablemente aquellas cosas ocultas, para entender más su porque o para estar más segura de las decisiones que tomo. Ahora descubro que eso me guió hacia una total confusión, donde me resulta imposible distinguir lo que realmente importan de lo que no. Me encuentro llena de dudas, angustia y millones de cosas que no se cómo se llaman y mucho menos cómo explicarlas.

Mientras escribo todo esto, en un inútil intento de aclarar las cuestiones dentro de mi mente, no puedo evitar sentirme como una cobarde por evitar esta realidad que me hace tan mal... Se que uno debe luchar cuando las cosas no son como le gustaría; se que uno debe ser la mejor versión de si mismo y no conformarse con la mediocridad, el azar o lo que mierda sea. El problema es que yo no puedo interferir, no me gusta alterar el curso de las cosas... pero ahora, siento que este curso es por mi culpa al no arriesgarme por lo que siento e intentar ser la mejor versión de mi misma.

Se que esta realidad no es más que un producto de mis propios miedos, inseguridades y egoismos... Y también soy conciente de que esto va a conducirme hacia una total infelicidad. Lo peor es que sigo acá escribiendo, como si se tratara de la vida de alguien más, por quien siento pena... por no poder luchar y dejarse dominar por miles de cosas que mañana, no tendrán el más mínimo sentido.