miércoles, 23 de diciembre de 2009

La cruel realidad

A veces pienso en todas las cosas en las que creímos cuando eramos más chicos y en las que aún, tal vez por ingenuos o idealistas, seguimos creyendo. Todos esos sueños, deseos. El amor, el romanticismo, la amistad incondicional, pelearla por aquello que querés (sin corromperte), etc. Dónde queda todo eso, a medida que la vida te patea y pisa, una y otra vez? Será que nacemos con la intención de construir algo mejor y terminamos rindiéndonos a la rudeza de vivir con los pies asentados en la tierra, resignándonos a que la naturaleza del hombre solo es una y nosotros no somos la excepción?
No quiero pecar de susanita, ni mucho menos. No creo que el sentido de la vida esté en casarse y formar una familia o no. Simplemente planteo que hasta los sentimientos más básicos están dañados.
Sobra tan
A veces pienso en esto, miro mi alrededor, escucho diferentes historias de vida... A veces, siento que todo es tan superficial y vacio. Me llena de tristeza percibir solo interés pasajero en la oz de las personas, brillo de codicia en sus ojos, abrazos fríos.
ta tecnología, avances, moda, programas absurdos de tv, revistas sobrecargadas de palabras que dicen tan poco... y falta tanta humanidad, compromiso. Amor

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